Si observan el tagline de mi blog, afirma que “Fastidia gente desde 2004”. Esto lo digo porque el 22 de enero de 2004, por sugerencia de una amiga, me hice bloguero. En ese entonces no tenía ni concepción de lo que era un blog, solo lo pensé como un diario personal, una forma de expresarme. Han pasado ya 16 años, y sigo haciéndolo. No solo eso, con el paso de los años me gustó tanto escribir que me transformé en escritor, y fue gracias al blog. Creo que es hora de hacer un breve resumen del camino recorrido.
Empecé de manera muy inocente: contando mi vida cotidiana y discutiendo asuntos que realmente importaban a poca gente. En realidad, casi nadie me leía, solo unos cuantos conocidos y amigos. Inicié en la plataforma LiveJournal, que si funcionaba más como un diario personal, y leía a personas de España y Sudamérica, principalmente. Ya no sé que ha sido de ninguno de ellos, pero era entretenido saber sobre sus vidas.
Con el tiempo obtuve conciencia de que tenía un público, lectores que no eran mis conocidos y que debía escribir con claridad para ellos. Empecé a cambiar mis temas, tornándolos un poco menos personales, y de vez en cuando publicaba entradas más complejas, que me llevaba más tiempo redactar. Creo que el primer giro para profesionalizarme en esto fue cuando tomé un curso sobre escritura de poesía y cuento. En la poesía nunca he sido demasiado bueno, pero en el blog pronto empezaron a aparecer cuentos.
Screenshot de mi LiveJournal en 2006.
Escribía mucho. Revisando mis archivos, había meses que escribía casi todos los días, a veces dos veces por día. También tenía bastante tiempo, a pesar que estaba estudiando ingeniería. Sin embargo, ya para ese entonces sabía que esa carrera no era lo mío, y que me gustaría irme más por el lado artístico y creativo. Ya había asistido antes a clases de fotografía, así que en el blog empezaron a aparecer también algunas fotos.
Le puse a mi blog “Botellas al mar…”, que es un nombre que hoy considero cursi. Pero mi idea era que, aunque en un principio no me leyera nadie, con el tiempo esos mensajes llegarían a alguien, como un mensaje dentro de una botella.
Pronto me pasé a Blogger, la plataforma que parecía estar de moda en ese entonces. Seguí publicando en LiveJournal y en Blogger simultáneamente durante mucho tiempo, pero le di más importancia a este último. Los niveles de lectores siguieron subiendo. Eran tiempos muy diferentes. No había tantas redes sociales ni tantas opciones de entretenimiento en internet. YouTube estaba en pañales, afortunadamente. Uno mostraba quienes eran sus amigos si incluía un enlace a su blog en la página principal.
Mi blogger en 2006.
En ese entonces existían también catálogos como Blogalaxia, y de pronto aparecí en lugares elevados de su top. El 26 de agosto de 2006, un bloguero con pseudónimo Pato Pascual hizo una lista de los 75 blogs más populares de México. Quedé en lugar 33 junto con bastantes blogs mexicalenses. El número uno fue “Huevotopía”, un blog que lleva inactivo desde 2016.
En 2006 inicié también un podcast al que le puse “El Canal Podcast” y fue receptáculo de todos mis experimentos. Grabé en manifestaciones en la frontera, en el BajaProg, en un Jack in the box, y hasta en mitines políticos. Todo con total libertad y sin censura alguna. Eso me tuvo muy feliz.
Otra cosa de la que estoy orgulloso es que nunca puse un solo anuncio en mi blog. Nunca lo comercialicé. Los blogs que comenzaron a depender de su publicidad se convirtieron en un nido de clickbait y cosas peores, desesperados por jalar visitas a como diera lugar. La calidad del contenido se fue hasta los suelos.
La mayor parte de lo que les platico es prehistoria. No mucho tiempo después llegarían Twitter y Facebook, quienes robaron casi todos los lectores a los blogs. De pronto ya el término “bloguero” se sentía anticuado y surgió el “twittero” y con el tiempo “youtuber”. No puedo decir que me guste más este panorama: a mi me gusta leer y escribir, y en la red se hace cada vez menos. De hecho, odio como Facebook se ha apoderado de casi todo. Es un cáncer de Internet. Antes podías ser leído si escribías bien y ofrecías buen contenido, hoy por fuerza hay que pagar para ser escuchado.
Ya para 2012, “Botellas al mar…” era un rincón olvidado de la red, y fue cuando abrí mi nuevo espacio “BadBit.org”. Compré mi propio nombre de dominio, y afortunadamente Hugo Gómez me ha prestado amablemente el hosting desde entonces. Ya van siete años. Comencé utilizando el sistema Drupal, el cual siempre fue difícil de mantener para mí, pero por fin he migrado a WordPress que es más sencillo para mis necesidades.
No puedo decir que le haya puesto el mismo entusiasmo al blog en estos últimos años, ya que me enfoqué en otras cosas como escribir algunos libros y artículos académicos. Sin embargo, es hora de retomar este olvidado rincón de la red. Los blogs no son, ni serán ya, lo que eran antes, pero eso no quiere decir que no puedan ser algo mejor.
Creo que en este año vienen cosas buenas.
Excelente, me tocó el nacimiento de Botellas al mar y verte crecer en creatividad, profundidad y oficio. Gracias por tus historias que son mías de muchas maneras, porque al final que es la vida, sino las historias que nos contamos.
¡Muchísimas gracias! Apenas voy viendo este comentario. Vendrán muchas más cosas en este blog.