La crítica de arte está en crisis: debe renovarse pronto o morir. La influencia que ejerció en siglos pasados, sobre todo en el siglo XX, se ha desvanecido casi por completo. Durante los años cuarenta, Clement Greenberg era la última palabra sobre el arte de vanguardia, pero hoy día este poder se le ha arrebatado al crítico. Hoy en día el curador, el galerista o incluso el coleccionista ejercen más poder.
Aún así, algunas iniciativas parecen mantener viva la llama crítica. Una de ellas es el sitio web “Obras de arte comentadas” (ODAC) (https://obrasdeartecomentadas.com/), editado por la museógrafa mexicana Baby Solís desde diciembre de 2017. El objetivo de esta esta página es difundir e interpretar el arte contemporáneo, especialmente aquel que no tiene tanta visibilidad y resulta excluido. En ocasiones solo comparte la imagen con los datos generales de la pieza, pero también comenta en video cuando el tema merece más detalle.
ODAC es comparable a otros proyectos digitales de crítica de arte que surgieron en décadas anteriores, sobre todo después de 2000. Por ejemplo, el canal de YouTube Gallery Beat, que inició como programa de televisión y migró a Internet, y el Tumblr New Aesthetic, que compartía imágenes de obras de arte. La crítica de arte surgió en revistas y folletines pero hoy en díam en muchos casos se ha retirado de los medios impresos, especialmente en México.
Esa es la importancia de ODAC. Tenemos cada vez menos suplementos culturales, y la crítica ya no se paga. He platicado con varios críticos de arte en México y coinciden en que ese oficio ya no da para comer porque no hay mercado. Algunos deben escribir para revistas extranjeras si desean subsistir y los demás buscan trabajos alternos para continuar su práctica crítica de manera gratuita.
A ODAC no le falta el sentido del humor y esto se aprecia desde su logotipo, que utiliza formatos anticuados de WordArt que con frecuencia aparecen en memes. El mundo del arte actual es incomprensible si no consumimos también los memes que genera, de los cuales hay muchos en ODAC, junto con parodias y obras que se burlan de tradiciones del arte o hacen crítica social y cultural.
Pero también se comparten invitaciones a eventos de todo el país, textos de diversos escritores sobre arte y noticias de relevancia, además de los comentarios de Baby Solís, quien no ha estado exenta de controversias y discusiones. Aún así, su sitio de Instagram acumula ya casi 23 mil seguidores, y su página de Facebook casi 60 mil. Se está transformando en una de las fuerzas importantes de la crítica en México.
Recientemente ODAC abrió su Patreon para financiar el proyecto. Los usuarios interesados pueden donar desde un dólar al mes para ayudar a que la página web continúe. Es un proyecto interseante, propositivo, que vale la pena conocer y apoyar.